El conjunto visitante llegó a este encuentro con serios problemas de descenso, por lo que se esperaba que fuera un partido abierto y de constantes ataques, ya que el Deportivo defendería su localía.
Durante la primera parte del encuentro no se tuvieron grandes acciones de peligro; que a diferencia de la segunda mitad, los locales realizaron más opciones de peligro y la intensidad aumentó considerablemente.
Sin embargo, las anotaciones no aparecieron para ninguno de los bandos, ni siquiera cuando al minuto 76 el silbatero central sentenció la pena máxima a favor del equipo local.
El costarricense Celso Borges fue el encargado de cobrar dicho penal, mismo que finalizó siendo detenido por el guardameta mexicano y viejo conocido para Borges, Guillermo Ochoa.
De este manera el conjunto del “tico” se mantiene en la posición 16 con 28 puntos; mientras que Granada continua en un penúltimo puesto aumentando el peligro del descenso.