“No podemos confiarnos en ningún momento porque aquí nadie perdona. Jamaica nos castigó”, aseguró Celso Borges.
Junto al volante, el también atacante de Costa Rica, Joel Campbell, señaló que el entorno futbolístico ya debe olvidar lo hecho en el Mundial de Brasil para enfocarse en la CONCACAF, donde los rivales son muy complicados y los jamaiquinos lo demostraron en su debut en la competencia.
“No debemos pensar en nada del pasado, porque eso afecta al grupo. Siempre es bueno pensar en el futuro. Jamaica mostró lo duro que es jugar aquí”, destacó el artillero.
Ahora Costa Rica apunta sus cañones hacia El Salvador, el próximo rival de la tricolor en la Copa, a quienes enfrentarán en Houston ante un estadio que estará seguramente colmado por cuzcatlecos.