El desarrollo se hizo parejo en un duelo que siempre es difícil de jugar por más que el tercer escalón del podio sea un buen botín por el que luchar. Italia tomó un poco más la iniciativa y generó algo más de peligro en el área contraria durante los primeros 45 minutos. 

La Celeste, que sentó a algunos de sus titulares habituales -Sebastián Bueno, Nicolás de la Cruz, Marcelo Saracchi- tuvo la claridad de siempre de Federico Valverde pero el 16 no encontró buenos socios. Rodrigo Amaral levantó en el segundo tiempo y su conexión al partido activó a los sudamericanos.

Fabián Coito movió el banco y buscó en Nicolás de la Cruz un eslabón más para la cadena de juego. No le sirvió para maniatar a Italia pero sí para sumar más control y definir a Italia en su faceta contragolpeadora. Generó pocas opciones, dos sobre el final muy claras de Juan Boselli y de José Luis Roodríguez que despejó bien el arquero Alessandro Plizzari.

Pero el marcador no se movió y fue a la de penales, la tercera consecutiva para Uruguay. Plizzari, de sólo 17 años, fue la figura italiana al parar los remates de Amaral y Boselli. 

Por: AFP