Comenzó el cotejo y los "Gringos" definieron su estrategia, la cual era defenderse bien ante los embates de los potentes ecuatorianos, para luego aprovechar cualquier error de estos para golpearlos.
La velocidad era la principal arma de los sudamericanos, quienes en las piernas de Arroyo y Ayoví tuvieron dos oportunidades claras de cara al arco de Guzan, sin embargo su falta de claridad en el último cuarto de cancha los tornaron poco peligrosos.
Al 21 apareció Clint Dempsey para poner cifras en el marcador, esto por medio de un cabezazo luego de haber robado el esférico en la mitad de la cancha para luego asistir a Boby Wood y que este le devolviera la cortesía con un centro al punto de penal.
Con el tanto del "Rapero", los ecuatorianos se lanzaron aún más al ataque, pero los dueños de casa tenían un arma secreta, Jon Brooks, que arriesgó el físico en los dos acercamientos más importantes de sus rivales, para convertirse en una muralla impasable.
La desesperación de Ecuador era una invitación para los dirigidos por Klinsmann para atacar y Bedoya estuvo cerca de ampliar la ventaja, sin embargo Domínguez pudo repeler su disparo.
Así finalizaría la primer mitad, con una escapada de la visita que fue bien repelida por le arquero de las barras y las estrellas, que no se inmutó al tener a Arroyo cara a cara.
Ya en el complemento, los ecuatorianos no mermarían sus embates y apenas al 48 tuvo un doble cabezazo que se escapó por la mínima por la línea de meta.
Dos minutos después se vendrían dos expulsiones, una para cada escuadra, Antonio Valencia para Ecuador por doble amarilla, mientras que para los norteamericanos vio la roja, Jermaine Jones.
Con más espacio en la cancha, los norteamericanos decidieron administrar mejor el balón, jugando más con la desesperación rival que llegaba y llegaba pero no acertaba.
Zardes pondría el 2 a 0 a favor de los estadounidenses al 65, esto luego de un cabezazo desviado que cayó en las piernas de Dempsey, quien a su vez bajó el balón en el área para disparar cruzado con la suerte de que el mismo Zardes estaba habilitado para enviar el balón contra las redes.
Seis después por fin pudo descontar la escuadra sudamericana, esto en una jugada de pizarrón en el cual en vez de lanzar el esférico al centro del área en un tiro libre, prefirió enviarlo al semicírculo para encontrar a Arroyo que con un "riflazo" vencería a Guzan.
Valencia tendría el empate en dos ocasiones consecutivas en su cabeza, pero increíblemente solo frente al arco erró ante un cancerbero totalmente vencido.
A pesar de la presión ecuatoriana, los Estados Unidos pudieron resistir y sorprender, de esta manera son semifinalistas de su Copa América.