El encuentro presentó los primeros 10 minutos volcados para el conjunto canalero, quienes buscaron una opción de peligro clara para concretar el primer tanto del juego y manejar el mismo.

Los ticos lograron equiparar el juego y poner un encuentro mucho más cerrado, un auténtico duelo de estrategias, una juego donde los disparos llegarían a cuenta gotas.

Los ticos que hoy vistieron de azul, como ha sido la costumbre en este torneo, optaron por el control del balón y la jugada más planificada. Por el contrario, el “Bolillo” y compañía prefirió resguardar un poco más y buscar las salidas al contragolpe.

En los primeros 45 minutos no se presenciaron verdaderas opciones de peligro en las porterías, aunque los vecinos del sur si se sintieron un poco más cerca del área, no obligaron a Patrick Pemberton a emplearse a fondo.

Un primer tiempo un poco más calculador por el “Macho” Ramírez, y Hernán Darío Gómez confiando en la imaginación y alegría que presentaron los panameños en los juegos anteriores en la Copa Oro.

El conjunto patrio inició el segundo tiempo muy revulsivo, con velocidad y sumando jugadores en ofensiva, complicando a la defensiva canalera. La principal opción de peligro estuvo en los pies de Bryan Ruiz, quien recibió el balón tras un lujo de Marco Ureña, quién se sacó del sombrero un taquito filtrado para el capitán.

El “10” tico le pegó como venía, un zurdazo sólido y fuerte, pero no muy colocado. El guardameta sacó los reflejos y envió el balón al córner, tras la mejor opción del partido. A continuación el juego volvería al ritmo del primer periodo, la sele con el balón sin profundidad y Panamá aguardando en defensa.

Los canaleros tomarían su tiempo para responder a los ticos, cuando Gabriel Torres daría la media vuelta y dispararía sin pensarlo dos veces. Patrick sacó los reflejos felinos y despejó a la banda, negándole el tanto a Torres.

Los ticos buscarían la anotación con un poco más que insistencia, pero no encontrarían la llave del candado defensivo local, hasta que en un tiro libre, donde lamentablemente Ariel Rodríguez salió lesionado, pero una de cal y una de arena.

Con la lesión del “Samurai”, cayó el tanto tricolor, cuando Aníbal Godoy desvió el balón tras un centro de David Guzmán. El desvío para la fortuna tica quedaría imposible para el arquero visitante, y los ticos celebraron un tanto con un poco más que suerte.

Tras la anotación, los ticos amarraron el juego y no llegaron más opciones de peligro, hasta que en una jugada planificada, Kendall Waston pivoteó el balón hacia Calvo, quien no aprovechó el balón  en la línea de fondo y se lo estrelló al arquero contrario.

Acto seguido, el balón le quedó servido a José Andrés Salvatierra, quién se tuvo fe y probó suerte de largo, donde consiguió un tiro de esquina más, donde ninguno fue bien aprovechado por los nacionales.

Los ticos siguen pecando en la creación de opciones, pero se mejoró el ordenamiento en defensiva, además de que seguimos siendo una selección resultadista. También, sumamos una baja más en el torneo, aún no se sabe cuánto estará afuera el delantero del Bangkok Glass, pero podría contarse la sexta baja para el “Macho” y compañía.

La última jugada de peligro estuvo en pies canaleros, con un tiro medio dudoso en el costado derecho de la defensa nacional. Para el tiro libre el arquero subió y en un balón que iba cerrando peligrosamente, ¡Patrick!, el arquero sacó el balón con las uñas y envío el balón al tiro de esquina y les dio un respiro más a los canaleros.

El tiro de esquina no generó más peligro, y el central dijo ¡ya no más!, y selló la clasificación patria en la siguiente ronda y la primera victoria en los juegos entre Panamá y Costa Rica en la Copa Oro, equipos que nunca se habían enfrentado.

Los ticos quedamos a la espera del juego entre Estados Unidos y El Salvador, que dará inicio a las 8:30 de la noche y nos dará el rival para el juego del sábado en horas de la noche. Con un juego más que calculador, Óscar Ramírez hace lo que se espera, incluso dejando disgustos en más de uno, pero logrando lo importante, las victorias.