La continuidad de Lionel Messi en el Barcelona se convirtió este jueves en un asunto “prácticamente imposible” después de que una reunión que se pretendía entender de cortesía para cerrar los últimos flecos del acuerdo entre las dos partes desembocara en una rotura absoluta, lo que unas horas más tarde se confirmó por parte del club, que acreditó el fin de la era de Messi a la "normativa de LaLiga española.
El crack argentino llegó el miércoles a Barcelona pendiente de los contactos entre sus asesores y los ejecutivos del club, pero ya lejos de aceptar los postulados de la entidad. El padre del futbolista aterrizó a última hora de la mañana, mientras ya se celebraba un encuentro en las oficinas en las que los representantes del Barcelona comenzaron a entender que las dificultades para cerrar el trato se tornaban inabordables y a primera hora de la tarde se dio por roto el asunto.